Más vale caer en gracia que ser gracioso ¿no? Y, aunque creo
que, de músico, poeta y loco, todos tenemos un poco, deberíamos mantener genio
y figura hasta la sepultura.
Dice el refrán (uno de tantos) que no hay dos sin tres y
que, por eso, a la tercera va la vencida. Sé que vosotros intentáis ser buenos
entendedores, de los que con pocas palabras basta y también sé que el tiempo es
oro, aunque no sea oro todo lo que reluzca, así que… intentaré hablar a todos
bien y dar una buena respuesta que, al fin y al cabo, mucho vale y nada cuesta.
Mientras hay vida, hay esperanza. Mientras las palabras no
se las lleve el viento, yo seguiré escribiendo, porque errando, errando, se va
acertando y porque jóvenes o viejos, todos necesitamos consejos.
He oído mil veces que ir contracorriente no es de ser hombre
prudente; que, de oportunidades perdidas, está la vida llena… Sin embargo, soy
de los que creen que hablando se entiende la gente, porque para hacer lo que
deseas, nunca es tarde si la dicha es buena. ¿Qué hay de malo en llevar un
loco dentro, dormido o despierto?... Fingir locura a veces es cordura.
Está claro que nunca llueve a gusto de todos y que entre las
gentes hay mil gustos diferentes, pero como más vale tarde que nunca y por
probar, nada se pierde, sé que, con tiempo y paciencia, adquiriré la ciencia,
porque cuando menos me piense, saltará la liebre y cuando una puerta se me cierre... otras cien se me abrirán.

¿Sabéis lo que me gustaría? Me gustaría que otros cardaran
la lana y yo criar la fama. O criar yo la fama y echarme a dormir… En fin, yo
seguiré como un loco con mi tema, pero, si es verdad que querer es poder…¡YO QUIERO! y no me cuesta trabajar, porque sé que el premio del trabajo justo es
honra, provecho y gusto y, aunque no sea más que por el mísero afán de
descansar, todos deberíamos trabajar.
Dicen que mujer graciosa vale más que hermosa. Llamemos al
pan, pan y al vino, vino... que sobre gustos no hay nada escrito y yo hoy he
aprendido que, al final, no hay mal que por bien no venga… que hasta el mejor
maestro echa un borrón, así que, como a grandes males, grandes remedios… borrón
y cuenta nueva. ¡Y a otra cosa, mariposa!
Y, hasta la próxima entrada y sea el día que sea... ¡¡¡Feliz Fin de Semana!!!